De santo, ni un pelo: todos los pelotudos publicando en facebook que se van a empedar en el nombre de Jesús.
Mi enlace del día es música que nadie conoce, como siempre, y nadie se pregunta ¿Qué sube ésta? Nadie se toma el tiempo de escuchar para conocer un nombre que quizás ubique... debo ser la única que lo hace.
Youtube me regala un viaje aun más interesante que el de todos los forros que se fueron a la costa.
(Mentira, quiero irme a la costa).
Y salir a merendar fue un sacrificio sobrenatural.
Las calles destrozadas por el temporal, los colectivos desviados, hace frío, y me patiné $100 en una tarde.
Carajo.
Me vuelvo a poner las puntas después de tantos meses y me pregunto si es realmente necesario volver a usarlas en clase. Quiero incendiarlas.
Siento olor a comida y me desespero. No puede ser que viva con hambre.. pero si, es: vivo con hambre.
Y no quiero salir.
Quiero las empanadas de mi vieja, quiero el CD de acusticos de Las pastillas, quiero mi cuaderno, mi cartuchera y unas cuantas muchas horas de soledad.
Y después veremos... Tal vez película, tal vez cama. Como si fuera un sábado de los míos, pero con dos sábados más por delante.
Que ¿lindo?
Dije alguna vez que detesto los feriados? Bueno, no lo olviden: LOS ODIO.
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