"Cuando te pido que me escuches y tú empiezas a darme consejos, es que no escuchaste mi pedido.
Cuando te pido que me escuches y tú empiezas a decirme el porqué yo no debería sentirme de esta forma, estás metiéndote en mis sentimientos.
Cuando te pido que me escuches y tú sientes que tienes que hacer algo para solucionar mi problema, estás errado, aunque te parezca extraño.
¡¡Escúchame!! Solo te pido que me escuches, no tienes que hablar ni hacer nada. Sólo escúchame.
A lo mejor es por eso que las oraciones a Dios funcionan, pues Dios es mudo y no trata de dar consejos ni arreglar las situaciones.
Por lo tanto ¿podrías simplemente escuchar?"
{Libro que estudié para rendir ayer.}
Muy al pelo.
No comments:
Post a Comment