Un tire y afloje constante. Cada tarde es una prueba de fuego, donde me apuesto a mi misma aver que tan lejos puedo llegar. A ver hasta donde aguanto, a ver cuanto me la juego por lo que amo. Y que querés que te diga? Si bien ya respirar hondo es costumbre, cada día cuesta más. Quedarme callada me resulta aun más difícil que bajar bien el giro a la seconde del adaggio, ese del que me caí todo el año y nadie nunca me dijo nada. El tiempo pasa y cada vez le busco más sentidos a la resistencia. No quiero padecerlo, quiero disfrutarlo. Disfrutarlo a mi manera, sabiendo que más allá de lo que afuera puedan ver, YO DEJÉ TODO. Y así lo hago, activando el "mute" en el momento en que las palabras dejan de tener un fin explicativo, eligiendo voluntariamente cuando involucrarme y cuando no seguir el juego, evitandome malos momentos y leyendo miradas para saber como sigue la cosa, para que nada me tome por sorpresa... bueno, digamos que aprendí a controlarlo.
Ya lo humano dejo de interesarme por completo, es sabido que soy una dentro y otra fuera del salón, pero no me resigno a que la humanidad ajena se coma mi aprendizaje. No me resigno a ser sujeto de comparaciones absurdas en las que se sube escalones pisando otras cabezas. Y me cansé de ser mi única exigencia, ser solo yo quien busque la forma de mejorar, mientras hacen fila para decirme la cantidad de errores psicológicos y emocionales que tengo, cuando simplemente quiero que me digan porqué, a siete meses de intentarlo, me sigo cayendo del giro. Pero no! Eso nunca pasa, porque al tiempo que yo empujo, hago foco, ajusto el centro y armo la espalda... la mirada está en ver quién no sabe que paso viene, a ver de quién podemos reirnos, a quién podemos denigrar moralmente, a quien tenemos que criticar por su irresponsabilidad... y así pasar horas hablando de lo mal que le va a ir en la vida a las personas que no se toman las cosas como yo me las tomo. (Si, no me considero merecedora del discurso, y aunque escucho prefiero sentirme al margen).
Claramente es de público conocimiento que prefiero que me humillen antes de que me ignoren, que necesito sentir que no pago solo por abrazos y que me gusta que la gente tenga palabra: Quiero que la exigencia sea real! Me aburrí de aburrirme, me aburrí de resistir en lugar de crecer, me aburrí de escuchar más de lo mismo, y preguntas en lugar de respuestas. El "te dejo ser" no conduce a ningun lado, prefiero llorar y sentir que sirvió para algo, antes que reirme de chistes sin sentido para seguir la corriente de un monton de sonrisas falsas (Que no dicen nada porque no sienten NADA). Sonrisas de quienes no son victimas del día, claro, porque jusssssto donde se posó la abeja hay una rama débil que no se quiere caer, y escucha con ojos llorosos mi estúpido consejo de "respira hondo y contá hasta 10" al tiempo que sonríe y no quiere dejar en evidencia que su personalidad y edad no le permiten sentir real el "no me afecta", porque en ella SI afecta.
A mis 17 años no le hacen daño esa clase de palabras, por eso ya no hablo cuando me toca (ah no, cierto, no me toca), porque a mi personalidad siempre le chupó un huevo todo, pero si su lágrima se decide a caer, me voy a sacar el bosal y voy a escupir unas cuantas verdades... ella no me chupa un huevo y esto no me resulta gracioso.
Y si, dirán que soy fría y desagradecida, pero así como los inteligentes pudieron leer el "te quiero" trás 29 insultos, quiero que quien entienda esto, comprenda que querer no significa callar, que la paciencia ya la perdí pero mi respeto lo tienen por el simple hecho de ser seres humanos...y el cariño, bueno, eso lo hablamos en otro momento.
Chau. Gracias por el espacio.
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