Si, me estabas diciendo...
Caminas por la calle con: una maya negra de danza, un pantalón azul con una pequeña rayita roja al costado que llevas puesto desde las siete de la mañana, unas zapatillas All Star rojas con mas mugre que lona, una cartera que pesa kilos y un rodete abananado asqueroso. Vos, en tu totalidad, estas asquerosa. Pero... no te importa. Esperas que la gente note con solo verte que acabas de tomar una clase y el cuerpo no te da para adaptar tu imagen a lo que ellos quieren ver. Vas a paso de tortuga, porque te pudriste de esperar el 107 y decidiste caminar, pero a cada paso te arrepentís mas. De vez en cuanto tiras un aplauso al aire, giras, saltas o tarareas canciones. Tampoco te interesa que la gente te mire, estas acostumbrada. Tu cabeza piensa en todo y a la vez lo olvida. Tan de golpe caen las ideas en tu mente, que como vienen se van. Cuando crees que por fin podes concentrarte en un pensamiento, misteriosamente se te dispersa el cerebro y volvés a caer en el bochornoso: 'cuanto falta?'. Las cuadras son inmensas, la gente cada vez mas molesta y tus ganas de llegar se incrementan en cada respiracion. Sacias tu hambre con coca porque no tenes ganas de entrar al supermercado, ojo, tampoco plata. Si, por primera vez en meses saliste sin plata. Una verdadera mierda el camino. Pero... no importa. A cada paso es mas corto, y disfrutas tan solo pensando que cuando llegues vas poder dormir.
Lo lograste, llegaste, por fin tenes tu mano apollada sobre el picaporte de la reja de tu casa. ¡Que satisfacción!. Caminar sola es muchisimo mas deprimente que hacerlo acompañada. Pero te la re bancaste, te sentís grosa, una ídola. Ya es de noche, tardaste como veinte minutos en hacer quince cuadras, pero no importa, igual te sentís genial. Estiras el momento, porque tenes en claro que no volvera a repetirse en años, o al menos, eso esperas. Cuando finalmente te decidís a girar la manija, te percatas de que esta cerrada y rapidamente comenzas a buscar en las profundidades de tu bolso morado las llaves de colores, para girarla y sentirte mas grosa aun. Pasan minutos y seguis sin allarla. Comenzas a desesperar y pensar en lo peor. Decidis sacar absolutamente todo lo que llevas dentro sobre el escalon. Al llegar al fondo comprobas lo que pensabas... el llavero de Peter definitivamente NO ESTABA ALLÍ. Aun así, aun no entras en pánico, porque supones que en minutos llegara alguien que te sacará de esa estúpida situación. Estúpida, si, porque te sentaste en el escalonsito, y los vecinos te miran con cara de compasion, pero bien sabes que por dentro dicen 'jaja pobre boba, se quedo afuera'. Al estar sentada, comenzas a recordar el hambre que tenias, que cada vez es mas fuerte. De la nada imaginas que doble cuarto de libra con manitos y piecitos se acerca a vos, hasta que de repente te das cuenta que, no, no era una hamburguesa, era la vieja de al lado... si, la que te odia por poner la musica fuerte a la hora de la siesta, que te mira con una sonrisita de arrogancia y te dice algo así como un 'buenas tardes'. No contestas. Te quedas plasmada viendo como se aleja. Su voz de anciana te recordó a tu abuela. Una imagen se te vino a la cabeza y te pones furiosa. Cambias de color, casi alcanzando el tono de tu cartera. Cerras los ojos y respiras profundo.
Si, es lo que estoy pensando, justo cuando paso la señora recordaste el comentario de tu abuela antes de salir 'Mi amor, llevate la llave, porque yo me voy a misa y tu hermano se va a entrenar, acá no va a haber nadie'
Y que queres que te diga al respecto, queridita? Sos, como diría una amiga tuya... una rrrrrrrrrrrrreverenda pppppelotuda!
No comments:
Post a Comment