En mis quince años he enfrentado diversos tipos de problemas y complicaciones. Particularmente cuando se trata de la ropa. Pero a medida que fui creciendo, fui encontrando soluciones a muchos de ellos. Aun asi, hay un misterio que todavia no logro revelar... ¿Por que la ropa NUNCA me entra en el bolso?.
Resulta que somos cinco personas en un fiat grisesito cuyo nombre no recuerdo, y si cada uno llevara todo lo que considera necesario, no habria forma de que los bolsos entren en el baul. Dada esta situacion, mi viejo limito el tamaño de los bolsos e implemento un metodo de inspeccion: Los armamos y él los mira; si le gustan, los sube al auto. Sino, hay que sacar cosas. Aunque este proceso me molesta demasiado (Porque casualmente, mi bolso es el que nunca pasa el test) admito que es mejor solucion que pasar dos horas empujando la puerta del baul de arriba a abajo hasta lograr que esta cierre a la fuerza. Porque aunque pasamos horas intentandolo, jamas lo logramos.
Teniendo en cuenta esta dificultad a la hora de empezar nuestras vacaciones, agarré el bolso mas pequeño que encontre y empeze a rellenarlo con prendas hechas bollo. Al llegar al tope de éste, comenze a presionar su interior, tirar del cierre, vaciar los bolsillos y volverlos a llenar. Pero nada. Ya axahusta y malhumorada tras una larga lucha con un pedazo de tela, dejé las cosas como estaban. Resultado: más de la mitad de la ropa quedo fuera. No, no. Definitivamente no. no me iba a resignar a dejar prendas abandonadas en la calurosa capital. Entonces pedi ayuda a mi madre, quien cuidadosamente doblo cada remera y la introdujo en el bolso de forma tal que no solo parecia mas prolijo, sino que entraban mas cosas. Pero aun asi, no alcanze mi felicidad. Sin mas que hacer, fui a quejarme ante mi viejo, aver si tenia suerte, lo encontraba de humor, y conseguia que me permita cambiar de bolso, pero no. Nada. "-Pero Melina, vos que te llevas?-" me pregunto...
No sé. Sinceramente no se que es lo que estoy haciendo mal. Pero nunca, desde que tengo uso de razon (realmente lo tengo?) logre llevar todo lo que me gustaria dentro de un mismo bolso.
Conclusion: Estoy condenada a viajar con una cartera de cuero tamaño XXL sobre mis piernas los 400km que me separan de La Feliz. Donde, ademas de aparatos tecnologicos y accesorios, viaja el 20% de ropa que no consiguio pasaje. Incomodo? Si, muy. Pero mas incomodo es labar ropa en plenas vacaciones!
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